La colitis afecta a personas de todas las edades y se da por igual tanto en hombres como en mujeres. La colitis puede ser de distintos tipos, dependiendo de su origen:
- Colitis ulcerosa. Es una enfermedad de tipo crónico que se caracteriza por la inflamación y presencia de heridas o úlceras en la pared interior del colon o intestino grueso. La inflamación empieza generalmente en el recto y se extiende hasta el colon.
- Dentro de la colitis ulcerosa podemos distinguir tres subtipos:La proctosigmoiditis, que se da cuando la inflamación afecta al recto y la parte inferior del colon, la colitis del lado izquierdo, que aparece cuando la inflamación afecta al lado izquierdo del colon que empieza en el recto, y la colitis total, que afecta a la totalidad del intestino grueso.
- Colitis tóxica. Es una complicación grave de colitis ulcerosa, que afecta y daña a la totalidad de la pared intestinal.
- Colitis asociada al uso de medicamentos. Si abusamos del consumo de ciertos antibióticos podemos llegar a dañar las paredes internas del colon, provocando la llamada colitis psudomembranosa. Esto se debe a que los antibióticos pueden alterar el equilibrio de bacterias que hay en el intestino favorenciendo así la aparición de enfermedades. Además, el consumo de ciertas sustancias como la vitamina C, los suplementos de hierro y los antiinflamatorios no esteroideos entre otros, puede generar irritación en la mucosa del colon y, por lo tanto, su inflamación.
- Colitis hemorrágica. Es ocasionada por la bacteria Escherichia Coli, que infecta el intestino grueso y producen toxinas que causarán tanto diarrea con sangre como un fuerte dolor abdominal.
- Colitis nerviosa. Puede aparecer cuando se viven situaciones de estrés, ansiedad y nerviosismo con frecuencia. Estas situaciones provocan contracciones en los músculos del intestino grueso, que aumentan la sensibilidad ante la presencia de gas y movimientos del sistema digestivo.
- Colitis granulomatosa. Se debe a un raro padecimiento autoinmune (cuando el sistema de defensas del organismo ataca a sus propios tejidos) conocido como enfermedad de Crohn o enteritis regional.
Los síntomas pueden variar en cuanto a gravedad y pueden aparecer de forma gradual o repentinamente.
- Dolor abdominal y cólicos
- Sangre y pus en las heces
- Diarrea
- Fiebre
- Dolor rectal
- Pérdida de peso
- Gases intestinales abundantes
- Fatiga
- Pérdida del apetito
- Anemia
- Deshidratación